Parásitos. Parasitosis vulvar
Dr. Alejandro M. Salvó para GinecoSalud
Ladilla
Una de las parasitosis más comunes es la causada un piojo el PHTHIRIUS PUBIS, conocido como ladilla. Mide entre 1 y 3 mm y se alimenta picando la piel de la zona. Deposita sus huevos o liendres en la base del pelo genital. Estas liendres tienen un periodo de incubación de 6 a 8 días. Se puede encontrar ladilla en otros pelos cortos del cuerpo como axila, pestañas y cejas. Las liendres y los piojos son visibles a simple vista o mejor aún con la ayuda de una lupa.
Produce prurito intenso en la zona genital sobre todo en la zona cubierta por pelos. El prurito vulvar, es uno de los motivos más comunes de consulta a médico ginecólogo. Afecta a mujeres de todas las edades, siendo muchas las causas que lo pueden originar. Muchas veces se acompaña de ardor y dolor local. El rascado intenso, generalmente nocturno, puede ocasionar lesiones secundarias ocasionadas por el traumatismo de las uñas o el frotamiento intenso.
La transmisión de la enfermedad es generalmente por contacto sexual con una persona infestada o por compartir ropa contaminada.
Como prevención se aconseja tener relaciones sexuales seguras, no tenerlas si se esta infestado, avisar a la pareja si se padece ladilla y no compartir ropa interior. En caso de probarse ropa en una tienda, hacerlo siempre sobre la propia ropa.
El tratamiento se hace con cremas, lociones o champús que contengan Hexacloruro de Benceno, Permetrina o Piretrina. Debe repetirse el tratamiento a los 7 días por la incubación de las liendres. El rasurado de la zona es muy efectivo ya que elimina los huevos alojados en los pelos.
Sarna
Otra enfermedad que causa intenso prurito es la Sarna o Escabiosis, producida por el SARCOPTES SCABIEI. Este insecto es un ácaro muy pequeño, algo menor a 0,5 mm, no visible a simple vista. Esta enfermedad puede afectar a cualquier persona no importando el sexo, la edad, la condición social ni la higiene personal. Afecta cualquier parte del cuerpo fundamentalmente en las zonas de roce, pliegue, axilas, entre los dedos y la zona genital. Se contagia generalmente por contacto directo o sexual pero no es la única forma ya que puede encontrarse el ácaro o sus residuos en la ropa, sábanas u otros tejidos. Las zonas húmedas facilitan la transmisión de la infestación.
Los parásitos hembra excavan túneles en la piel de la persona infestada donde depositan los huevos y excrementos, estos producen una intensa reacción alérgica local que produce inflamación e intenso prurito fundamentalmente nocturno. Se puede observar en la piel afectada salpullido, los túneles que se ven como final líneas blancas. Se agrega además, las lesiones producidas por el rascado intenso. Muchas veces las lesiones iniciales se sobreinfectan con bacterias. De los huevos salen las larvas que llegan hasta la superficie de la piel hasta convertirse en adultos. Desde la contaminación hasta la aparición de los primeros síntomas pueden pasar entre 3 a 5 semanas.
El tratamiento debe se siempre indicado y controlado por un médico especialista. Se realiza utilizando cremas o lociones con Permetrina asociado a tratamientos por vía bucal. Se coloca la medicación en todo el cuerpo desde el cuello hasta las extremidades por la noche, dejando actuar el producto hasta la mañana siguiente quitándolo con el baño corporal. Debe tratarse a todo el grupo familiar y la ropa debe ser lavada con agua caliente y planchada si es posible con vapor.
Trichomonas
Las Trichomonas vaginalis son parásitos productores de flujo genital. Este es característico por su color amarillo verdoso y mal olor. Se acompaña generalmente de prurito vulvar y ardor al orinar.
Es de transmisión sexual y el tratamiento debe realizarse en pareja utilizando medicamentos derivados de nitroimidazoles como el Metronidazol, el Segnidazol, el tinidazol , el ornidazol y el secnidazol. La dosis es de sólo 2 (dos) gramos ingeridos en una sola toma y por única vez, no es necesario repetir la dosis. Se aconseja no ingerir alcohol en las 24 hs seguidas a la ingesta del medicamento por riesgo al efecto Antabuse. El alcohol y ciertos medicamentos como el Metronidazol administrados conjuntamente hacen que la concentración del alcohol en sangre, aumente desproporcionadamente y provoque efectos indeseables como náuseas, vómitos y sudoración.
El uso del preservativo colocado antes del contacto sexual ayuda en la mayoría de los casos a prevenir la enfermedad.
No debe mantenerse relaciones con personas infectadas ni mantenerlas si uno se sabe infectado.
La promiscuidad sexual es como en todas las infecciones genitales, un factor de riesgo.
Si sospecha que está infectada acuda rápidamente a su ginecólogo y notifique a sus parejas sexuales